Coronavirus: su impacto en la transformación de las empresas y de los colombianos

Por: Yesika Padilla y Sebastián González

Más de 5 millones de colombianos no tienen ingresos por la pandemia, de acuerdo con información del DANE, esta situación es aún más crítica en ciudades como: Sincelejo, Cúcuta y Cartagena, identificadas como las ciudades que tienen un mayor porcentaje de la población sin ingresos.

La supervivencia económica de los distintos negocios en esta nueva realidad está
estrechamente relacionada con la transformación digital que parece haber sido paciente hasta ahora. La automatización y la inteligencia artificial son el nuevo oro en la operación de todo tipo de empresas que una vez aceptan la nueva realidad tienen dos opciones adaptarse o perecer.

En Colombia hemos apelado a nuestra creatividad y son varios y destacados empresarios dedistintas latitudes quienes han dado ejemplo de resiliencia y demostrado como cada crisis supone una oportunidad. Algunos de los casos que queremos destacar por su creatividad y relevancia son:

Inorca, una compañía dedicada a la fabricación de sillas para teatros, esta vez, la compañía pudo aprovechar una gran lección de las crisis pasadas: diversificar. En materia de productos,
ya no solo produce sillas para carros, cines o auditorios; también, desde 2014, fabrica mobiliario para el sector salud: camas, camillas y sillas multipropósito, que durante la pandemia han crecido un 60% en ventas.

Almacenes Only es una marca de tiendas de ropa popular muy tradicional en Bogotá que se ha caracterizado en sus más de 60 años de historia por prestar un servicio muy cercano a susclientes, con una atención personalizada y utilizando las mismas formas de venta desde hace décadas, con la pandemia y ante el cierre de sus tiendas por la cuarentena, quedó en evidencia el riesgo que corrían al no poder comunicarse con sus clientes por depender únicamente del contacto personal.

El Only reaccionó rápidamente creando una línea de ventas a domicilio vía Whatsapp para poder seguir prestando sus servicios, lo hicieron de una forma muy artesanal y con unos recursos limitados, pero eso mismo es lo que queremos destacar, ese esfuerzo que va más allá del conocimiento y que se potencia en los momentos de máxima necesidad.

Crepes & Waffles es una empresa que desde los años 80 se ha posicionado como uno de los restaurantes con mayor demanda en Bogotá y ha expandido su operación a nivel nacional. Una de las principales características de su modelo de negocio es la atención personalizada dentro de sus restaurantes, realizada por madres cabeza de familia, esta situación sumada a la dificultad de preparación y presentación de sus platos nunca les hizo pensar a sus dueños que el negocio pudiera funcionar bajo el modelo de domicilios, pero con la llegada de la pandemia, les tocó rápidamente adaptarse a las necesidades de sus clientes y a las posibilidades que ofrecía el mercado.

Montaron un servicio propio de domicilios operado por madres cabeza de
familia, siendo esta la forma de garantizar la calidad de la entrega de sus productos, pero adicionalmente, decidieron dar sus primeros pasos en el camino de la transformación digital y firmaron alianzas estratégicas con las principales aplicaciones de delivery para poder ofrecer a sus clientes mayor facilidad al momento de realizar el proceso de compra, pago y entrega de los pedidos a través de internet.

Destacamos la iniciativa de estas tres empresas para adaptarse al cambio. Asimismo, consideramos que esta es una coyuntura que pueden y deben aprovechar todas las empresas para iniciar o profundizar la Transformación Digital. De hecho, una expresión de esa Transformación Digital es el Marketing Digital, que permite mercadear productos y servicios a través de la Web, y el denominado eCommerce o Comercio Electrónico, que permite y facilita la
venta por Internet usando pagos electrónicos.

Si entendemos estos cambios como una oportunidad para invertir, las empresas podrán dar un salto cualitativo que les puede ayudar a mejorar su productividad, por ende, ser más competitivos y generar más oportunidades laborales para los colombianos que viven en condiciones más vulnerables.

*Yesika Padilla – Directora de Economía Digital

*Sebastián González – Miembro de Número

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4ta Revolución Industrial: Tecnologías para vivir mejor

Por: Yesika Padilla
@YesikaPadilla

El término “Tecnologías 4.0” hace referencia a las tecnologías que hacen parte de la llamada 4ta Revolución industrial. La primera revolución fue hace mas de 200 años cuando la máquina de vapor sustituyó al trabajo manual y la tracción animal. 

Esa tecnología, que ahora nos parece rudimentaria, dio paso a una transformación económica y social muy fuerte, pues permitió la creación de las primeras mega fábricas, que atrajeron a la gente de las poblaciones rurales a los núcleos industriales. La segunda revolución industrial ocurrió al comienzo del siglo XX y se caracterizó por la producción en masa de automóviles y el uso extensivo de la electricidad, que surgió como una forma de aprovechar la energía que se producía en las grandes hidroeléctricas al usarla en los centros de producción.

La tercera revolución industrial vino con el transistor y la capacidad de poder poner muchos transistores en un pequeño espacio, el microprocesador, lo que permitió crear la radio, la televisión y el computador; fue la revolución de la electrónica y es la que nos rige ahora. La cuarta revolución industrial surge con ese nombre por primera vez en la feria industrial de Hannover, Alemania, y fue acuñado por Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial. Más tarde, “Dominar la Cuarta Revolución Industrial” fue el tema de la Reunión Anual 2016 del Foro Económico Mundial en Davos-Klosters, Suiza. Las principales tecnologías de esta nueva revolución incluyen la robótica, inteligencia artificial, cadena de bloques o blockchain, nanotecnología, computación cuántica, biotecnología, internet de las cosas, impresión 3D y vehículos autónomos. 

Todas estas nuevas tecnologías confluyen en la denominada ‘computación en la nube’, que permite acceder a los datos desde cualquier lugar del mundo e interactúan con los dispositivos móviles al alcance de millones de personas en el mundo. Como ejemplos tenemos mercados donde se puede tener un asistente virtual que ayude con las tareas domésticas y laborales, y, a la vez, ese mismo asistente puede ser su novia(o) virtual, y tener un robot en forma de perro que adquiera su personalidad de acuerdo a su dueño, lo que evidencia que la humanidad ha ido transformando la ficción en parte de su realidad. De otro lado, en el Foro Económico Mundial de 2016 se discute por primera vez la posible desaparición de miles de trabajos por la automatización, dado que las máquinas no sólo sustituirán empleados fabriles, sino que se están volviendo más inteligentes y también podrían reemplazar trabajos administrativos que hasta ahora eran impensables para las máquinas. 

Así las cosas, esta revolución altera no solo la forma en la que se transforman las industrias, sino cómo sobreviviremos como personas, por eso se habla de que no es solo una revolución Industrial sino socioeconómica. En el campo de la educación, empezamos a repensar el concepto de profesionalismo, pues el hecho de ir a la universidad y obtener un título ya no va a ser garantía de conseguir un trabajo formal, calificado y bien remunerado. Ya vemos como gigantes de tecnología contratan talento humano empírico sin certificación de instituciones universitarias y que son muy buenos en, por ejemplo, programar. En cuanto a la realidad virtual y aumentada se empieza a tener la necesidad de experimentar cosas que en la vida real no se podría, como ir a conciertos de personas que ya no están con vida, vivenciar una película, o sentir en el mundo real las acciones que realiza en los videojuegos en su mundo virtual.

En síntesis, ya estamos inmersos en la Cuarta Revolución Industrial con todas sus implicaciones, tanto positivas como negativas. En este escenario, Colombia tomó la delantera pues en el 2019 Medellín fue escogida como la sede del primer centro de la Cuarta Revolución Industrial de América Latina. Asimismo, entidades como el SENA ya empezaron a capacitar a miles de estudiantes en Internet de las Cosas aplicada a la industria. Al mismo tiempo, el Gobierno adoptó recientemente la plataforma X-Road, creada por Estonia, para proveer todo tipo de trámites a través de Internet y facilitarle la vida a los ciudadanos. 

El reto es y será usar todas estas herramientas tecnológicas emergentes y disruptivas como palancas que nos permitan cerrar las brechas sociales y económicas de Colombia. En otras palabras, que la aplicación y el uso de todas estas herramientas nos beneficien a todos y promuevan la competitividad del País.

*Directora de Economía Digital de Alcentro.